En este post aprenderás para qué sirve el autosabotaje y cómo aplacarlo para alcanzar propósitos y tus sueños. 

Aparece en forma de dudas, de voz interna que te dice que no puedes, que es imposible, que ya si eso empezarás en mejor momento… 

Es el causante de que te paralices y que con tu no hacer se alejen tus propósitos, tus metas, tus sueños. 

Seguramente no le tengas demasiado aprecio. 

¿Cómo amar a quien te mantiene anclada en una incómoda conformidad de no progreso, tan lejos del escenario que imaginaste con toda la ilusión?

Puede que te enfades un poco cuando te diga esto, pero en realidad…

Si sabes interpretarla y tomar acción a partir de ello, la visita del autosaboteador es de las mejores cosas que te pueden suceder en el verdadero camino hacia tus propósitos y tus sueños.  

Ahora mismo te lo cuento:

¿Cuándo aparece el autosaboteador? 

• Cuando tus propósitos no han nacido de ti, sino que los has adoptado por presión social, para agradar a otros, para encajar… 
• Cuando realmente te da miedo la nueva situación que vivirás  cuando logres tu objetivo. 
• Cuando te asusta demasiado algún punto del camino para lograr tus propósitos.
• Cuando no ves un beneficio claro frente al esfuerzo, no sientes que merezca la pena ponerse en marcha. 
• Cuando tu propósito está muy alejado de algún área prioritaria en tu vida que necesita más tu atención. 
• Cuando no te sientes capaz de lograr tu objetivo. 
• Cuando no te crees realmente merecedora de lograrlo. 

¿Y para qué lo hace?

Esto es algo que necesitarás preguntarte a ti misma en tu caso concreto. Pero aquí te cuento algunos de los motivos más comunes:

• Evitar que desperdicies energía en cosas que realmente no te llenarán.
• Alejarte de tus miedos (protegerte).
• Avisarte de que no estás prestando atención a algo prioritario. 
• Evitarte un sentimiento de frustración.
• Incluso para  alejarte del sentimiento de culpa que te acecha cuando no te crees realmente merecedora de tus sueños.

Visto así…  Estarás conmigo en que…

Permitir la visita del autosaboteador no es de locos, ni de torpes, vagos o necios… En realidad es un hecho muy necesario. 

 

Recuerdo a una mujer especialmente activa y resolutiva que necesitó 4 años para entregar un proyecto al que la mayoría dedicaba un máximo de 4 meses.  El autosaboteador la había visitado para recordarle que… en cuanto le validaran este proyecto (un trabajo fin de carrera) se convertiría en Ingeniera y en su puesto de trabajo pasaría a firmar como tal, adoptando una nueva responsabilidad  ante la que se sentía muy insegura.

Cuando por fin, guiada por una profesional, se enfrentó a identificar el por qué de su parálisis y a gestionar su miedo a las responsabilidades de su nueva cualificación, pudo entregar su proyecto, adquirir la titulación por la que había estado esforzándose 5 años e incluso  disfrutar de un puesto mejor.

Necesitamos darnos un espacio para comprender qué quiere decirnos el autosaboteador. Si no lo hacemos… creamos un espacio especialmente confortable para el no avance, la baja autoestima y el sentimiento interno de estar desaprovechando el tiempo, de no estar dando ni recibiendo lo mejor. 

 

En este ejercicio de tres pasos te muestro cómo aprender de tu autosabotaje y cómo hacer para eliminarlo sólo entonces, segura de no recaer en situaciones no resueltas.

EJERCICIO ANTI-AUTOSABOTAJE

Recuerda que este ejercicio, como todos los que te proponemos en este blog, no es para que te juzgues ni te machaques, sino para que, mirándote con todo tu cariño, puedas aprender de ti y seguir adelante. 

Toma un tiempo de al menos 40 minutos para ti, alejada de ruidos y distracciones. 

Ponte cómoda y… ¡adelante!

PRIMER PASO

Imprime o copia esta tabla y responde por escrito a cada pregunta. 

(La escritura a mano facilita una reflexión más profunda y te invito a ella, pero si prefieres hacerlo a ordenador, adelante. En todo caso: escribe. Responder a las preguntas sólo en tu mente no tiene el mismo efecto).

SEGUNDO PASO

Hecha esta primera reflexión en la tabla, respóndete a esta pregunta con absoluta sinceridad. Recuerda que todo lo que respondas está bien. No estás aquí para juzgarte, sino para ayudarte a destapar qué te está frenando de verdad. 

¿Qué estás ganando con el abandono o la no implicación plena en el logro de tu propósito? 

Para identificar todas las ganancias o beneficios de no implicarte al 100% en tu propósito, puedes ayudarte de frases como:

• Me estoy protegiendo de…
• Evito enfrentarme a…
• Evito desprenderme de…
• Consigo dedicarle más atención a…
• Evito sentirme… 

Escribe todas las ganancias, no escatimes en detalles.

Estás descubriendo para qué te ha visitado el autosaboteador y esto te servirá para desbloquearte ahora y en posibles escenarios futuros. 

Respóndete con todo el cariño y toda la sinceridad. 

Y cuando ya lo tengas… escribe:

¿Qué decides hacer ante estos descubrimientos?  

Para responder a esta pregunta, puedes plantearte cuestiones como estas:

• ¿Realmente necesitas protegerte de lo que te indica el autosaboteador o tu miedo es un miedo antiguo, producto de una situación que ya no es real?
• En caso de que necesites protegerte de algún peligro que consideres real, ¿cómo puedes hacerlo? ¿Cómo lo vas a aplacar? ¿Quién te puede ayudar?
• Si hay algo a lo que necesitas renunciar para lograr tu propósito, ¿es ese algo tan importante? En caso afirmativo, ¿cómo puedes tenerlo en cuenta, darle su espacio en la forma adecuada para que te permita avanzar?

TERCER PASO

Agradece tus descubrimientos y felicítate por haber hecho este trabajo. Celébralo haciendo algo especial para ti.

Muy pocas personas se atreven a enfrentarse con tanta sinceridad a su diálogo interno paralizador. 

FELICIDADES y… ¡¡¡ADELANTE CON TUS SUEÑOS!!!

QUIERO ESCUCHAR LO QUE QUIERES DECIR…

¿Qué te dice tu autosaboteador? 

¡¡Nos vemos en los comentarios!!